Summary
Un día, una amiga que era como una verdadera hermana, confesó que iba a tener un hijo de mi esposo.
“Felicitaciones, Alena.”
Una amiga que lejos de sentir vergüenza quiere mi bendición.
“No digas tonterías. ¿Crees que el divorcio es posible?”
Un marido desvergonzado que a pesar de que se convirtió en Conde gracias a mí, no siente arrepentimiento.
Aunque fue un matrimonio concertado para saldar la deuda de la familia, he trabajado tan duro por mi matrimonio…
“El divorcio es una obviedad.”
El problema es el contrato matrimonial con mi esposo.
Si solicito el divorcio primero, ¡la multa será de 500 mil millones!
Mi padre, que invirtió todo su dinero en evitar la fuga de bienes culturales… Su único legado que heredé, fue la capacidad de distinguir las cosas bellas.
En muchos sentidos, ¡es hora de idear una estrategia de divorcio increíble!
“Espéralo ansiosamente, Rowen. Caerás de una manera que tu pobre imaginación no podría imaginar.”