Summary
Ella lo dio todo para hacer que su hijo, el tercer príncipe, León, sea emperador. En el día que sueño se hizo realidad, ella fue al lugar donde el ataúd del emperador estaba, donde ella encontró a su hijo muriendo envenenado que el mismo había bebido. “Nunca… fui feliz en mi vida.” Solo desesperación quedo para Elisha, quien sostenía el cuerpo frio de su hijo. “León…” Sin embargo, después de perder la conciencia, ella se despertó para darse cuenta que su joven hijo la estaba mirando con su linda cara.